miércoles, 7 de noviembre de 2012

Amarillo el submarino es...


Me comentaba un amigo por qué no había actualizado el blog en estos días  Bien es cierto que lo suelo hacer tras los partidos, pero realmente hasta anoche no veía salsa al asunto. La Copa del Rey es un torneo absolutamente desprestigiado, diseñado para equipos humildes donde nadie te va a felicitar por derrotar al Alcoyano y si pierdes te dejan la cara pintarrajeada de mala manera como aquella noche contra el Alcorcón. Ademas, la polémica de esos días fue a todas luces absurda: el Real Madrid actualmente no tiene un modelo de negocio donde los jugadores de la cantera sean pilares de la estrategia deportiva o comercial. A Cherishev le sobra competencia, Morata necesita mas garra, Jesé ya tenía que ser asiduo de los entrenamientos y José Rodriguez mas allá de la fama de estos días ni siquiera es titular en el Castilla. Más allá de ellos, poco veo que sirva para el primer equipo pero sobre todo, tienen el problema añadido de que el manager general jamás ha sido un hombre de cantera sino de jugadores veteranos curtidos en mil batallas. Tampoco lo han sido ninguno de los entrenadores de la historia reciente del club con peores registros y contadas apuestas por los juveniles por lo que al final tenemos que este asunto no es mas que un arma arrojadiza que juega con las ilusiones de los chavales. Estilos aparte, no se le puede reprochar nada a Mourinho: lo ha ganado todo con esa filosofía y se ha labrado un puesto de honor entre los entrenadores. Sería bonito que además fuera promotor de la cantera pero qué le vamos a hacer. Bastante tiene con meterse en todos los berenjenales y gestionar los egos en el primer equipo como para ponerse a discutir con Alberto Toril (que parece olvidar que su cargo y su sección están a disposición del club).

Luego vimos el partido de Zaragoza y su desarrollo me recordó demasiado a la entrada anterior contra el Mallorca: partido solventado en el minuto 25, sumamente aburrido y con la mirada puesta en las próximas citas. Realmente poco hay que destacar y no me pareció que diera para tantas líneas ya que llegaba Champions, competición donde podemos calibrar realmente el potencial de esta plantilla. Porque, aunque la prensa irradie felicidad y considere el grupo prácticamente cerrado, se pudo comenzar esta edición perdiendo contra el City, perdiendo en Dortmund, perdiendo en el Bernabeu y por tanto, eliminados en primera ronda. Todo ello sin olvidar que los alemanes en una eliminatoria a doble partido han retratado por completo al equipo, muy desdibujado y falto de ideas.

Y es que en noches como la de ayer se ponen en evidencia algunos de los detalles que hemos señalado por estos lares. El principal, la medular. Si ya de por si, Mourinho no es un hombre dado a un centro del campo creativo, visto lo visto tenemos Khedira y Essien para rato. Y no porque Modric hiciera un mal partido sino porque el luso hay veces que plantea alineaciones para demostrar que clase de equipo tiene realmente. No tenía futuro el juego del croata al lado de Xabi ante un equipo tan disciplinado y táctico, sino que la noche demandaba maquinaria pesada, fuerza y garra: todo lo que no vimos en la primera parte en lugar de las imprecisiones de Cristiano, el descontrol de Di Maria o el fallo de Casillas (el santo la hubiera parado). Y de ello el culpable es Mourinho como entrenador y manager general.

A ello hay que sumarles las desafortunadas actuaciones de Arbeloa e Higuain. El primero absolutamente retratado en el gol de Reus (maravilla de jugador) y despistado en el segundo en el balance de la defensa ante Gotze, elevado en estos partidos a la categoría de crack total. Y al pipita únicamente reprocharle un paso: el que iba por detrás en todas sus acciones. Concediendo tantas facilidades en defensa y ataque es complicado sacar algo positivo frente a uno de los mejores equipos contra los que ha jugado el Real Madrid en los últimos años, por lo que hay que dar gracias por lo poco útil que hizo Ozil durante el partido. Todos maravillados salvo Sergio Sauca, encantado de que el balón saliera del campo antes de completar su trayectoria (lástima que entrase) y visiblemente molesto por el empate. Pero bueno, ya estamos acostumbrados a ver partidos merengues narrados por comentaristas poco o nada afines al madridismo, pero esa es otra historia...

2 comentarios:

  1. Totalmente de acuerdo en los 3 primeros párrafos.
    En desacuerdo en el último.

    Si es verdad que estar en el Real Madrid te pide algo mas, pero no todo el mundo puede (ni debe) ser Marcelo sacando el balon por banda. Arbeloa hizo un buen partido defensivamente y presionando la salida del Borusia. En el primer gol mas que desajuste es una buena jugada de los alemanes que Arbeloa tiene la suficiente sangre fria para no hacer penalty. En el segundo gol es CULPA DE RAMOS. Mirate las repeticiones... a donde va?

    Modric creo poco y no destruyó nada.
    Essien de los mejores del partido, dio estabilidad en el centro del campo.
    Higuain... no comments.

    Samu

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    1. Ramos tampoco se cubrió de gloria, de hecho el fallo lo origina él.. Pero fíjate que la defensa bascula hacia la banda en esa jugada y Arbeloa lo hace tarde.a partir de ahí poco podía hacer...
      De todas formas gracias por el aporte.

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